Docentes con vocación marcan el camino de la educación del Bachillerato Técnico
Quito, 18 de agosto de 2021
Tras 13 años de trabajo como profesor, la huella que deja David Núñez, agrónomo de formación pero con vocación docente, es grande en la Unidad Educativa Eduardo Salazar Gómez, ubicada en el Distrito 17D09 Tumbaco. No solo por los conocimientos que imparte en la asignatura de Agrotecnología para estudiantes de Bachillerato, sino porque bajo su liderazgo se implementó el Bachillerato Técnico Productivo (BTP) con la figura profesional de Elaboración de Lácteos.
El proceso inició hace algunos años con la implementación de las Unidades de Producción y proyectos didácticos productivos en la institución, hasta que se consolidó el BTP con convenios con micro empresas. Al momento, ya son tres promociones de jóvenes de BTP que la institución da a la sociedad, y se preparan para iniciar un cuarto ciclo.
David asegura, que tras retornar al país luego de estudiar una maestría en el extranjero, su propósito era contribuir en el desarrollo de la educación y el sector productivo. Con esta premisa en mente, decidió modificar la forma de enseñar, implementando estrategias enfocadas en actividades y espacios de prácticas para los estudiantes.
De este modo, se trabajó con la institución y el Distrito en la mejora de espacios de módulos de trabajo, construcción de laboratorios, apertura de la Unidad de Producción de Animales mayores, galpones, abonos orgánicos, producción de cultivos hidropónicos, invernaderos para la producción de cultivos, entre otros.
Sin embargo, la pandemia dio un giro a este proceso. Si bien al inicio fue un reto implementar estrategias educativas, la vocación y creatividad de los docentes fue clave durante la educación en emergencia, con el aprendizaje y manejo de aulas virtuales, y la ejecución de proyectos de crianza de animales, producción de cultivos y de forraje verde hidropónico en los hogares de cada estudiante.
En este año lectivo que culminó, la unidad educativa fue una de las instituciones que apostaron por el retorno progresivo, voluntario y semipresencial a las aulas. Con este retorno fue posible que los estudiantes de Bachillerato y BTP puedan practicar lo aprendido en la virtualidad. Con gran emoción, asegura David, los estudiantes pudieron ingresar a la planta, elaborar productos y su proyecto de grado de forma vivencial.
La formación de Bachillerato Técnico y Bachillerato Técnico Productivo en especial, tiene objetivos claros, propiciar la inserción laboral y creación de microempresas en los jóvenes estudiantes. David destaca dos casos de éxito de la primera promoción de BTP, ambos tienen sus propios emprendimientos y comercializan productos como queso, yogurt y manjar de leche.
La siguiente meta para David, es continuar fortaleciendo el Bachillerato Técnico y el BTP con la creación de una red interdisciplinaria entre asignaturas técnicas y científicas para que los estudiantes puedan aplicar sus conocimientos en temas prácticos.
El compromiso y vocación de docentes como David, el empeño y esfuerzo de jóvenes estudiantes que cursan el Bachillerato Técnico y el BTP, son claves para consolidar un sistema educativo de calidad, de la mano de todos los miembros de la comunidad educativa.
El Ministerio de Educación enfoca su gestión en cinco ejes prioritarios: Encontrémonos, Todos, Libres y Flexibles, Fuertes, y Excelencia Educativa; este último enfocado en el impulso a la orientación vocacional, la educación técnico-profesional y la articulación entre el Bachillerato y la Educación Superior.