Ministra de Educación participó en el III Encuentro de Ministros de Latinoamérica
Quito, 23 de abril de 2021
La ministra de Educación, Monserrat Creamer, participó este viernes 23 de abril de manera virtual, en el III Encuentro de Ministros de Latinoamérica. El objetivo fue reunirse para dialogar y escuchar las experiencias que cada uno de los países de la región está viviendo frente al retorno a clases presenciales en condiciones adecuadas de bioseguridad.
Los ministerios de Educación de Colombia, Ecuador y Guatemala fueron los anfitriones, en coordinación con la Red Latinoamericana por la Educación (REDUCA) y con el apoyo de especialistas del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y de la UNESCO (OREALC), organizan este III Encuentro REDUCA de Ministros de Educación de Latinoamérica.
Monserrat Creamer resaltó durante la reunión que, estos espacios permiten tener una visión conjunta de lo que pasa en educación en la región ante la pandemia del COVID-19, “en Ecuador nos preparamos para acelerar el retorno a las instituciones educativas con necesidades de inversión en salud y recursos educativos. La reapertura no es solo indispensable para fortalecer los aprendizajes sino para la reactivación total de la sociedad”.
Creamer expresó que en estos espacios se plantean inquietudes, dificultades y aciertos que enfrentan los sistemas educativos de la región, “es fundamental continuar trabajando en revalorización docente, a través de programas de formación. Los sistemas educativos tienen que flexibilizarse y generar alianzas para seguir enfrentando los retos y desafíos.”
Durante la reunión se expusieron inquietudes, dificultades y aciertos que enfrentan los sistemas educativos de la región, esto permitirá definir medidas concretas de cooperación y conformar una red de funcionarios de Latinoamérica que estén articulados en forma transversal y directa para dar respuestas con la urgencia que las circunstancias requieren.América Latina, sin duda, ha sido y aun es una de las regiones del mundo más golpeadas por la emergencia del COVID-19. Las escuelas cerraron a lo largo y ancho del territorio y a pesar de los enormes esfuerzos realizados hasta la fecha, el impacto de la pandemia ha sido muy grave; los niveles de aprendizaje y las trayectorias escolares han sido fuertemente afectados, particularmente entre los niños de menores recursos.
Ante esta crisis, la región tiene la urgente necesidad de planificar y definir acciones prioritarias para garantizar la seguridad de las operaciones escolares y la atención educativa a las poblaciones más vulnerables, así concluye el informe del BID y la UNESCO presentado en el pasado mes de diciembre.
Dicho documento hace un llamado a la acción regional para que todas las respuestas educativas se basen en los principios fundamentales de inclusión, equidad y no discriminación, analizando las posibilidades, restricciones y necesidades que enfrentarán los países de América Latina y el Caribe durante el proceso del regreso a las clases presenciales.