Quito, 26 de diciembre de 2017

Producción de textos y uniformes escolares beneficia a más actores económicos. Alrededor de 15 millones de textos y 660 mil uniformes estarán disponibles para el inicio a clases en el Régimen Escolar Costa 2018-2019

La entrega oportuna, planificada y gratuita de textos y uniformes escolares a todas las instituciones educativas públicas es un factor fundamental para garantizar la calidad de la educación. Por tal motivo, en los siete meses de servicio del Gobierno Nacional, el Ministerio de Educación optimizó los procesos de gestión educativa en la adquisición de textos y uniformes escolares, con miras al inicio a clases del Régimen Costa, que iniciará en abril de 2018.

Aproximadamente, 15 millones de textos escolares estarán impresos para más de 2,4 millones de estudiantes, desde Educación Inicial hasta Bachillerato, y 106 mil docentes de las instituciones fiscales y fiscomisionales del Régimen Escolar Costa, a nivel nacional. Así lo confirmó el ministro de Educación (e), Jaime Roca, quien añadió que se han desarrollado acciones para mejorar las bases de los concursos impresión de textos escolares y garantizar la transparencia en los procesos de contratación.

“Mediante tres consejos consultivos, 16 empresas y la ciudadanía aportaron sustantivamente con sus observaciones para mejorar los procedimientos (de contratación) que estaban siendo manejados por el Ministerio de Educación”, afirmó la autoridad.

La inversión final en textos escolares asciende a USD 14 millones. El resultado de este trabajo también significó un mejoramiento en la oferta de los precios referenciales, lo que se evidenció en un ahorro del 23 % en el precio final, es decir, alrededor de 3 millones de dólares.

El Ministerio de Educación entregará uniformes escolares a 660 mil estudiantes de las instituciones públicas del Régimen Escolar Costa 2018-2019. La inversión para este efecto ascendió a USD 19 millones de dólares. Los proveedores  de indumentaria educativa se rigen a estándares de calidad que garantizan la durabilidad y confort requerida para el desarrollo integral de los niños, niñas y adolescentes.

Otro resultado positivo es la dinamización de cientos de pequeños productores de cada una de las localidades en donde hay demanda de uniformes escolares. Esto se ha logrado a través de la contratación desconcentrada de más de 2.000 asociaciones de producción textil, por parte de los Distritos Educativos, ubicados alrededor del país.