Quito, 7 de octubre de 2024

La comunidad educativa se une para recuperar y preservar espacios históricos, fomentando su cuidado y protección

Ubicado dentro de la Reserva biósfera del Chocó Andino, el sendero ancestral del Yumbo es un camino lleno de historia, que guarda la riqueza cultural de sus habitantes. Es en este espacio, donde los estudiantes de Bachillerato Técnico (BT) de la Figura Profesional de Ventas e Información Turística, de la Unidad Educativa Fiscal Nono, han empezado un ambicioso proyecto para impulsar el turismo comunitario.

El sendero abarca desde la comuna de Alaspungo hasta Tandayapa, sin embargo, varias promociones de estudiantes han trabajo desde 2020 en la valorización de un tramo de aproximadamente un 1 Km ½, cercano al plantel, generando un producto turístico que beneficia a la comunidad.

Bolívar Tonguino, docente de BT, encabeza el proyecto que actualmente se realiza con 52 estudiantes de Bachillerato. Con el apoyo de la VVOB (Education for development), empezaron a trabajar en el sendero con figuras antropomorfas y zoomorfas; y la elaboración y ubicación de señalética en puntos estratégicos como el mirador, observación de aves, paisajismo, así como, información sobre plantas comestibles, maderables y medicinales.

Para los estudiantes esta es una gran oportunidad, ya que pueden realizar prácticas preprofesionales guiando a los turistas, además, que aprovechan el entorno para desarrollar proyectos interdisciplinarios con procesos de investigación, turismo con lupa y de aventura.

“Recuperamos el sendero y hacemos memoria cultural de la nacionalidad de los Yumbos, además, los estudiantes trabajan en equipo, desarrollan valores y liderazgo, mientras se empoderan de un espacio”, destacó Bolívar, quien, además, asegura que el compromiso de su comunidad educativa es grande, ya que, para mantener el sendero en buen estado, realizan adecuaciones y mingas. 

Mayra Vargas, estudiante de Bachillerato, conoce cada detalle del sendero, desde cómo llegar, hasta los espacios más representativos como el mirador. Con emoción comenta que participó en la identificación de las plantas comestibles, colocando el nombre científico y sus beneficios. “Es una buena experiencia donde puedes conocer todos los recursos”, acotó. 

Este sendero ancestral es un espacio que aún no ha sido aprovechado en su totalidad. Es por ello que, el plan futuro de la institución educativa es activar un modelo de turismo comunitario y rural, inventariar y valorar los atractivos y servicios turísticos para que se complementen con el sendero mayor.

Para el Ministerio de Educación, es una prioridad fortalecer el Bachillerato Técnico, desarrollando habilidades y conocimientos en los estudiantes, para que estén mejor preparados para enfrentar los desafíos del mundo laboral y contribuir al desarrollo del país.