Portoviejo, 25 de octubre de 2021 

Se realizó evento virtual con estudiantes de la UE Sucre

Este lunes 25 de octubre se puso en marcha un nuevo período de clases de la Modalidad Semipresencial Intensiva Fase IX, dirigida a personas con escolaridad inconclusa de Manabí y Santo Domingo de los Tsáchilas.

Se realizó un evento virtual simbólico de inauguración con la participación de estudiantes y directivos de la Unidad Educativa Sucre del cantón 24 de Mayo, así como autoridades educativas de la Zona 4.

En este territorio son 7.892 nuevos estudiantes los que se inscribieron en el programa intensivo para culminar sus estudios hasta el Bachillerato, a través de las 45 instituciones educativas que lo ofertan en las dos provincias.

A través de la oferta de Escolaridad Inconclusa, los servicios educativos de Alfabetización, Post Alfabetización, Básica Superior Intensiva y Bachillerato Intensivo, brindan a los estudiantes la posibilidad de culminar sus estudios en 5 años, dirigidos a personas de 15 años que no han culminado la Educación Básica y a mayores de 18 años que no han concluido el Bachillerato.

Considerando la situación de la emergencia sanitaria del país, sus estudios continúan mediante el Plan Educativo “Aprendemos Juntos en Casa”, con el apoyo de medios tecnológicos y el acompañamiento de los docentes quienes garantizan el proceso formativo de la población.

María Arteaga Vera, rectora de la Unidad Educativa Sucre, indicó que este programa tiene una gran trayectoria y ha permitido triunfar a miles de personas que en su momento no pudieron terminar sus estudios por diferentes motivos.

Franklin Mera Zavala, coordinador Zonal 4, expresó sus felicitaciones a quienes tomaron esa decisión valiente de retomar sus estudios para conseguir su título de Bachiller que les permitirá acceder a la universidad y ser grandes profesionales. “Quiero agradecerles por ser ese ejemplo para muchas personas, porque dan esperanza y demuestran que con esfuerzo, capacidad y entrega diaria pueden mejorar su calidad de vida”, añadió la autoridad.

Los servicios educativos extraordinarios para jóvenes y adultos permiten la reivindicación al derecho a la educación en cualquier momento de la vida, aportando con herramientas y destrezas para la cotidianidad y el trabajo, como una manera de romper el círculo de la pobreza.