Quito, 24 de mayo de 2023

‘La convivencia armónica y cultura de paz la construimos todos’.

“Para lograr cosas grandes hay que trabajar en grande”, señaló Flor Chiluisa, estudiante de 3.° de Bachillerato Informática de la Unidad Educativa Patrimonio de la Humanidad, ubicada en el Distrito Educativo 17D03-La Delicia. Para Flor, es importante incentivar en sus compañeros el respeto, compromiso, trabajo en equipo y constancia: “Tenemos que atrevernos a soñar, a expresar nuestras emociones y a entender que no hay ideas malas”, destacó con entusiasmo.

Del mismo modo, Angélica Veliz, de 3. ° de Bachillerato en Ciencias, resaltó que su principal compromiso es promover el amor propio, la fuerza interior y la innovación, ‘con esfuerzo todo se puede’, señaló con seguridad: “Me gusta ayudar a las personas, aconsejarlas, hacerles ver sus fortalezas y enseñarlas a apreciar también sus debilidades, porque de ellas aprendemos y nos hacemos más fuertes”, afirmó.

Y estos mismos sentimientos altruistas lo comparten 28 estudiantes mujeres de la Unidad Educativa Patrimonio de la Humanidad que fueron parte del programa ‘Mujeres Poder’. “Me llamó la atención cuando supe que se abordarían temáticas de empoderamiento personal, autoestima, estereotipos y resiliencia”, indicó Heydi Pilca, estudiante de 3. ° de Bachillerato en Ciencias, quien además comentó que todos estos aprendizajes favorecieron su seguridad al momento de exponer y hablar en público, permitiéndole así, mejorar sus calificaciones y rendimiento académico.

Según señala Yuli Moreira, estudiante de 2. ° de Bachillerato en Ciencias, el programa se llevó a cabo mediante capacitaciones presenciales organizadas por Yanbal en coordinación con Women for Women: “Fue una experiencia muy bonita porque aprendimos a través de experiencias y vivencias que nos compartieron otras personas, definitivamente fue un espacio muy bonito que nos abrió la mente; en lo personal, me ayudó a mejorar mis relaciones interpersonales con mis compañeros en clases y con mi familia en casa. Ahora, desde nuestras propias experiencias, compartimos estos mensajes con toda nuestra comunidad educativa y las personas que están a nuestro alrededor”.

Después de seis meses de capacitación presencial que se llevó a cabo durante los días sábado, las chicas se graduaron del taller en una emotiva ceremonia realizada durante el mes de febrero, desde ese momento, las jóvenes estudiantes se sintieron comprometidas y empoderadas en promover estas enseñanzas a todos sus compañeros, siendo parte de sus principales objetivos la promoción de la resolución pacífica de conflictos y la generación de espacios educativos más empáticos, seguros y de paz. Porque como señala Nathaly Pérez, estudiante de 2. ° de Bachillerato en Turismo, la convivencia armónica y cultura de paz “es trabajo de todos”.

“En mi aula, tres chicas participamos del programa y hemos venido trabajando con nuestros compañeros para fomentar la integración y mejorar el ambiente escolar. Antes, yo tenía una visión individualista, pero entendí la importancia de trabajar en equipo, respetar y valorar la opinión de las personas, porque definitivamente el cambio empieza por uno mismo y este resulta muy contagioso”, expresó con entusiasmo Nikyta Armas, estudiante de 3. ° de Bachillerato Ciencias, quien a la vez enfatizó que su meta personal es la búsqueda del bien común.

Su docente coordinadora, Patricia Monta, indicó que el objetivo del plantel educativo es socializar estos aprendizajes importantes a toda la comunidad estudiantil: “Hemos venido abordando estas temáticas durante los minutos cívicos y lo seguiremos aplicando en lo que resta del año lectivo con grupos más pequeños de trabajo, es muy positivo para la comunidad educativa y no descartamos la posibilidad de que el siguiente año escolar lo continuemos promoviendo”, aseguró.

La Subsecretaría de Educación del Distrito Metropolitano de Quito, a través del eje de trabajo “Excelencia Educativa” impulsado por el Ministerio de Educación, promueve la articulación con los diferentes sectores de la sociedad, para que los esfuerzos conjuntos permitan favorecer una educación integral, de calidad e inclusiva y seguir fortaleciendo los espacios de convivencia armónica y cultura de paz.