Adultos mayores rompen barreras y vuelven a estudiar con el programa de alfabetización

Guayaquil, 13 de mayo de 2025
Con entusiasmo y determinación Jacinto Torres, de 75 años, inició el año lectivo 2025-2026 como estudiante de octavo año de Educación General Básica. Es uno de los adultos mayores que retomó sus estudios gracias a la oferta educativa: Alfabetización y Post alfabetización impulsada por el Ministerio de Educación.
Todas las tardes, junto a otros compañeros, asiste a clases en el Centro Gerontológico Municipal de Samborondón, donde el aprendizaje se vive con una metodología participativa, dinámica y adaptada a sus necesidades.
Jacinto reconoce que el programa transformó su vida. Aprendió a escribir su nombre y hasta hacer cartas de amor tras décadas fuera del sistema educativo.
Cuenta que el programa de alfabetización no solo lo ha ayudado a sentirse más seguro sino a mantener su mente activa “a través de los libros que leemos, las sumas, restas y otros ejercicios que nos hacen realizar he podido aprender mucho. Estos tres años han sido muy significativos», dice con gratitud.
El septuagenario anhela convertirse en bachiller de la República. “Quiero que mi hija y mis nietos se sientan orgullosos de mi”.
La docente Marjorie Isanoa Sinche explica que la oferta de alfabetización comprende segundo y tercer año de básica, mientras que la de Post alfabetización engloba cuarto, quinto, sexto y séptimo año de básica. Asimismo, señala que para sus clases utiliza recursos innovadores como mapas interactivos, realidad virtual con lentes de cartón y celulares, y actividades manuales para captar la atención y motiva a sus estudiantes.
«Antes de empezar la clase hacemos una previa introducción del tema a tratar, usamos libros didácticos y tecnología para que el aprendizaje sea más vivencial», comenta Sinche.
Ella resalta las ganas de aprender que este grupo de adultos mayores tienen cada vez que acuden a recibir sus clases.
Un ejemplo de ello es Ana Merelo, de 72 años, quien luego de dos años en el programa de alfabetización ahora cursa el octavo año de educación general básica. En ese tiempo no solo ha reforzado la lectura, sino también a usar la tecnología para desarrollar sus lecciones de matemáticas. “Me retiré de los estudios cuando cursaba tercer grado y por falta de recursos no me pude graduar. Aquí he aprendido que nunca es tarde y estoy segura de que podré culminar mis estudios”, dice emocionada.
De su lado, Lucía Antepara, también de 72 años, comparte su alegría por aprender a leer y escribir: «Llegué sin saber leer, ni escribir, pero ahora ya puedo escribir el abecedario y hacer tareas. No logré estudiar porque vivía en el campo y mis padres no tenían recursos. Pero ahora hay facilidades para estudiar como las que da el Ministerio de Educación”.
Lucía, quien es parte del programa de alfabetización, sueña al igual que Jacinto y Ana graduarse como bachiller de la República.
Desde su inicio en 2014, el programa de alfabetización ha llegado a adultos mayores que desean aprender y seguir activos. La participación de personas como Jacinto, Ana y Lucía demuestra que nunca es tarde para aprender y que la educación es un derecho para todos. En la Zona 8, que comprende Guayaquil, Durán y Samborondón, 245 adultos mayores se benefician con esta oferta educativa.
El Ministerio de Educación reafirma su compromiso de seguir promoviendo la educación para todos, sin importar la edad, porque estudiar siempre será una oportunidad para crecer y transformar vidas.